Ayer, 20 de noviembre de 2008 ha cumplido 2 añitos Sofía, la hija de uno de mis mejores amigos... Pedro. Me ha parecido muy bonito dedicarle unas palabras a una persona con la que he rellenado muchísimas páginas de mi vida. Cuando te llamé para felicitarte por el cumple de Sofía, se me encendió la chispa de algunas "peripecias" de las nuestras, en concreto me he acordado cuando hacíamos llorar a las papeleras o cuando le dábamos candela a los cubos de basura y/o contendedores... curiosamente tú me has dicho que precisamente hoy habías estado rememorando tales "aventuras"... qué bueno. Luego he llamado al tercer componente de la trinca (Óscar) y se lo he contado... jua, jua, jua... hace un par de findes, "ayudando" a hacer la mudanza de Adri, estuvímos recordando precísamente nuestras aventuras cual titanes emulando a Prometeo cuando le robó el fuego a los dioses para entregárselo a los hombres.
Bueno Pedrito, muchos besos para Sofía, para Yoli y para tí, tenemos pendientes una comida-cena para reescribir la historia. Dejo las historias prohibidas para otra ocasión, no quiero empañar algo tan bonito como el segundo cumple de Sofía...
Aunque pensándolo mejor... ahí va un anticipo... fue durante la madrugada de viernes a sábado de una fría noche invernal, era la década dorada de los 90. Tras hacer saltarnos cuatro clases del "nocturno" (El nocturno era el instituto al que íbamos los desechos y casos imposibles tras repetir 2 veces 3º de bup y otras 3 3º; allí nos juntamos lo mejor de Getafe y parte del norte de gibraltar. A nuestros padres les decíamos con pose caballeresca: "papá, mamá, he decidio apuntarme al nocturno porque quiero trabajar y ser una persona de provecho, además, dicen que a los que van a nocturno, los profes son muy cosiderados, les ayudan a estudiar y por consiguiente, es más sencillo aprobar... tras mirarse nuestros padres a los ojos y tra un largo en inquietante silencio, si había servido el primer argumento, había que anticiparse a cualquier comentario, había que controlar los tiempos y soltar la leyenda urbana de que "si fulanita, la hija de Fulano y Mengana=padres nobles de una ejemplar alumna que tras dos abortos entre los 15 y los 16 años rehizo su vida estudiando dos carreras enteras, eso sí, porque pasó por el nocturno y se reformó... tras esto solían caer, ero estaba el tercer argumeno: os acoráis de Pepita?? sí hombre, aquella amiga vuestra que se separó... pues se apuntó al nocturno e incluso iba a clase con las barras de pan, todo un ejemplo de sacrificio y desvelo por una buena causa, aprobar el bup para ir a la universidad y ser gente de provecho..." Ciertamente, eso les servía a la gran mayoría de alumnos, excepto a mi, que tenía y tengo por padre a un político profesional y vocacional. Todos mis argumentos me los desmontaba mi padre, como la nochebuena esa que vinieron Pedrito y Óscar a buscarme a casa para irnos por ahí a pinchar ruedas, a tirar piedras, a quemar contendeores o a pegar saltos reventando la fiesta de Nuria, la hermana de Pedro... menos mal que Sergio, el otro hermano, siempre nos daba cobijo en sus fiestas... Pues eso, que esa nochebuena, llegaron los otros dos componentes de la santísima trinidad (San Luis, San Pedro y San Óscar en medio), y le dije a mi padre, veeenga papááááááá, que Pedro se ha venido desde la casa de su abuela en madrid exprésamente para salir conmigo esta noche y Óscar lo mismo, veeeeeeenga, y contestarme mi padre: "Luisito, déjate de demagogias baratas" pues qué coño, que con 18 o 19 años te dicen eso y prefieres un padre que te suelte una hostia, pero que no te zumbe la cabeza, verdad o no??
Total, que como a mi madre me la tenía ganada, pues que nos fuimos a casa de Pedrito, justo en el portal de enfrente a mi casa (esa fue la versión... lo que sucedió esa noche es para otra historieta... y otra cosa, recalcar que hace casi 20 años, en nochebuena no se solía salir como ahora... no os acordáis??)
En fín, que la noche de los cubos quemados, tras ir a tan solo a lá penúltima clase, la de Ángel, el profe de Historia, que nos molaba porque nos dejaba entrar pedos tras bebernos un litro de lágrimas del jabalón y comernos 4 potitos, (le molaba nuestro punto de vista sobre la hitoria porque la tuneabamos, recordáis el examen en el que preguntó la romanización en españa y se lo conté en clave de vampiros, cuando rellené casi diez folios por las 2 caras diciendo que los romanos vinieron a chuparnos la sangre y bla, bla, bla...
Coño, que me voy del tema, pues la noche de los cubos ardientes, tras salir de clase de Ángel nos fuimos al SPANDAU, el garito más de puta madre del mundo mundial, solo comparable con el BALI-HAI. Pues allí, en el SPANDAU, bailándo música de The Cult, The Mission, The Cure, Depeche Mode, Nine Inch Nils, Rage Against the Machine, Joy Division, etc. etc. bailando sin camiseta (que siempre me lo recuerda Pedro), a lo Tony Manero, descamisado, jugando en el futbolín de pollas fluorescentes... pues nos fuimos animando, animando, y sin quererlo comenzó la noche más larga de los contenedores ardientes y las papeleras lloronas...
...continuará...
Os dejo esta canción para que recordéis viejos tiempos... os acordáis con esta canción en el Festimad?? ha lllovido... han pasado más de 12 años...
Luigi, Artista de los Milenios
