Sólo un camino es el correcto

Decisiones, todas nos llevan a un camino, el único verdadero, aquel que tomamos sí o sí. Por mucho que las consecuencias no sean las esperadas o al menos las deseadas, es la única verdad puesto que es la única realidad que tienes. Hagas lo que hagas seguro que será lo correcto aunque te equivoques, el arrepentimiento no tiene mucho sentido a pesar de estar ahí, latente y cansino, repetitivo y obsesivo.

Todo esto cambiará cuando viajemos en el tiempo. ¿Viajar en el tiempo para cambiar algo que no te gustó, te causó daño y fue susceptible de mejorar? ¿Qué sucedería en el mundo? ¿Caos? No se sabe aunque se intuye.

Así que por ahora para atrás ni para coger carrerilla. Hagas lo que hagas seguro que será la opción correcta puesto que es la que has tomado en el momento de elgir.

Por lo pronto voy a desconectar que van siendo horas.

A meditar... buenas noches.

¿Qué hay de nuevo?

Eso me pregunto... ¿Qué hay de nuevo? el bucle de siempre, lo reiterado, lo repetido, lo cansino, todo es nuevo a la vez que no lo es. Esa libertad que únicamente puede llegar a sentirse en soledad, esa es la unión con el más allá, la unión más cercana a lo que debe ser el otro lado. Paz, libertad, imaginación, la solución a todas las preguntas. Entonces desaparece el agobio, la desesperanza, comienza ese camino del que nunca quieres salir, no quieres que nada ni nadie influya en tu objetivo. 

Por más que dudo y pienso, hay diferentes piezas que no encajan, a veces creo que es cuestión de que ese momento mágico que tanto he anhelado llegará cuando menos me lo espere, sin embargo, son más las veces que caigo en la desazón y me da por pensar que jamás lograré alcanzar un objetivo que no debería resultar tan complicado de alcanzar. Pero las ideas siguen deambulando, los pensamientos, y es entonces cuando dices... hasta aquí, a partir de ya voy a ser dueño de mis actos, ya que apenas puedo serlo de mis pensamientos. Pero la sorpresa o decepción suele resurgir, a veces con más fuerza, hasta el punto en el que no soy capaz de encontrar esa chispa.

Cada día me cuesta más actuar, a veces incluso me siento partícipe de un montaje que me produce la mayor parte del tiempo cierta repulsa y necesidad de pasar página. Pero a falta de saber tocar la tecla correcta, bastante "premio" es superar cada día. Cuando comienza la noche no quiero que acabe, quiero que se alargue, no quiero entrar en ese asqueroso juego donde cada día me cuesta más participar. Es verdad que la mayor parte de las personas no van haciendo el mal como modo de vida habitual, pero aquellos cuya condición les hace ser egoístas por encima de todo, me producen más asco que pena. 

En ciertos foros de positivismo ignorante y ventajista se habla de que las cosas son de una manera o de otra en función de como nos las tomamos cada persona. Se viene a decir que cada cual elige como afrontar cada situación en cada momento, eso es presumir que somos libres, ¿será así o dependerá de cada persona? Más allá de nosotros y nuestras circunstancias hay un fundamento que pretende convencernos de que somos libres y dueños de nuestras vidas. Una tarea muy ambiciosa a mi entender. Es que a veces no todo acompaña, nada más.

Otra cosa que me hace optar por retomar ciertas aficiones que me resultan más gratificantes es el hecho de que voy a probar a cambiar ciertos patrones de conducta con la sensación de que esta vez sí que voy en serio, esta vez parece que me acompañan esas fuerzas con las que apenas puedo contar. 

Espero dejarme ver más por este espacio tranquilo en el cual puedo dar salida a tantas palabras que se me acumulan en mi interior. Quizá exista una necesidad de desahogo, quizá sea una manera de encontrar un atajo para poder dedicarme a aquello que me hace estar en paz conmigo mismo y con el mundo.

A descansar... y hasta pronto, que son muchos los acontecimientos que ocupan mis pensamientos y prefiero pasar página y a ver como amanece el nuevo día. ¿Qué hay de nuevo? 

¿Qué es para tí un peluquero?

¿Qué es para tí un peluquero? con esa pregunta Ángel me dejó la pelota en el tejado por una sencilla razón. Desde siempre he defendido los oficios, la artesanía, el arte en definitiva. Ante esta pregunta estoy convencido que sería capaz de escribir más de mil páginas al respecto. No queriendo ser cansino voy a procurar ser breve y conciso.

Ser peluquero es algo más que cortar el pelo, ser peluquero es ser estilista, psicólogo, confidente, amigo, así, para empezar. Ser peluquero es una profesión muy infravalorada en este país fruto de una falta generalizada de respeto y de menosprecio hacia el trabajo de unos profesionales que están muy cualificados. Empezando por eso y por el hecho de que desafortunadamente aún hay muchas personas a las que ir a la peluquería es un mal necesario y caro, por lo que no dudan en ir buscando lo barato de oca en oca y tiro porque me toca. 

Las malas experiencias son muchas ya que en general no se le da la suficiente importancia a este profesional, de hecho existen muchas peluquerías concentradas en pocos kilómetros a la redonda en la mayoría de ciudades y pueblos, lo peor no es eso, lo pero es el intrusismo laboral existente ya que en un momento de apuro, de necesidad, cualquiera se atreve a realizar cortes de pelo a máquina e incluso los hay osados que se atreven con pelos largos, no sólo a cortar o a peinar... que bueno... hablamos de teñir, de aplicar productos químicos para los que únicamente están capacitados los profesionales de la peluquería. Yo me pregunto, por qué las autoridades de las administraciones públicas no toman iniciativa y regulan este negocio mediante ordenanzas municipales, bandos, reglamentos, leyes... por qué se permite una competencia desleal en la que se brea a impuestos, inspecciones, controles de sanidad, etc. a los "panolis" que sí tienen todo en regla, que son escrupulosos con las leyes, que crean empleo de calidad y contribuyen a las arcas públicas infinitamente más que aquellos a los que se les permite y autoriza implícitamente a aprovechar de que estamos en un lugar donde parece ser que todo vale para el que se salta las leyes. Se aprovechan también de que pueden permitirse bajar los precios muy por debajo del precio de coste/horas de trabajo. Devalúan un sector de por sí machacado. 

Ante épocas de crisis económicas muchas personas son las que se ven obligadas a recortar en gastos "superfluos", uno de ellos algunos lo consideran ir a cortarse el pelo, si eso me lo hago en casa o voy a una "peluquería" de esas low cost. Allá cada cual con sus decisiones pero yo opino que debemos ayudarnos entre todos, si voy a una peluquería de verdad, quizá pague algo más pero personalmente soy de los que opina que merece la pena. Primero porque da gusto estar en manos de verdaderos profesionales, segundo por el hecho de que esos profesionales normalmente tienen familia, hogar, gastos... y también son consumidores de otros productos y servicios.

Al final no quiero enrollarme y me enrollo. La verdad es que es rara la persona que no tiene una anécdota sucedida en una peluquería a lo largo de su vida. El peluquero es alguien de tu entorno de confianza, el peluquero es un verdadero ARTISTA pues cada trabajo es único y lleva parte de él o ella. El peluquero debería de ser una profesión mucho más valorada, contribuye a mejorar la imagen y autoestima de las personas. El peluquero es amigo de verdad, poco a poco se van estableciendo vínculos en los que aflora la relación humana y en la mayoría de las ocasiones sirve de terapia incluso mutua, pues el peluquero además de ARTISTA es persona y a veces recibe más cariño, simplemente por ser escuchado, de un cliente que de un amigo o un familiar, casi siempre ese cariño es recíproco, y por eso merecen lealtad. Por eso los peluqueros son de las pocas personas que tienen bastantes amigos y son de verdad. (El resto de mortales como mucho tenemos 5 o 6 amigos de los de verdad... y seguro que entre ellos hay algún peluquero... o están en proceso).

Procuro ser objetivo a la hora de dar mis opiniones y exponer mis pensamientos, máxime cuando lo hago en este espacio que es mío y tengo total libertad para contar lo que considere oportuno. Eso no deja de ser una paradoja pues esa misma objetividad puede ser entendida como una subjetividad en sí al ser un sesgo particular.

Aquí dejo el enlace de su web para que echéis un vistazo de los dos grandes profesionales de los que os he hablado... Ángel y Carlos (por orden alfabético):

http://www.gaudenciopeluquerias.es/

Sin más, agradecer a Ángel y Carlos (familia incluida) todo su buen hacer, su afecto, su compromiso, hacernos sentir más atractivos, compartir confidencias, risas y algún que otro mosqueo o desahogo. Por muchos años más!! Gracias por todo y ánimo!! que ser peluquero es algo más que cortar pelo. 

Gracias ARTISTAS!!